Uno de los cadetes accidentados, Erlan Condori Calle, volvió a ingresar en estado de coma este lunes a causa de la gravedad de las lesiones que sufrió el pasado 18 de abril al caer de una altura de 25 metros mientras realizaba el “salto de la muerte”, en el aniversario del Colegio Militar en La Paz, junto a su compañero Cristian Alexander López.
Condori mostró signos de recuperación el 4 de mayo al despertar, mover los brazos y reconocer a su padre en la sala de internación. Sin embargo, el joven ingresó nuevamente en estado de coma, informó Correo del Sur.
Por otro lado, el cadete Cristian Alexander López ya pasó por su cuarta cirugía y, según su madre, las lesiones en las piernas son muy graves y seguirán exigiendo justicia a las autoridades.
“Mi hijo fue sometido a su cuarta cirugía, tiene las piernas destrozadas. ¿Qué será del futuro de mi hijo? No voy a permitir más injusticias contra él. (…) Nosotros estuvimos presentes en el incidente y vimos cómo nuestros hijos cayeron”, dijo.
Nuevamente, la jornada pasada los padres de ambos jóvenes hospitalizados salieron las calles de la sede de Gobierno exigiendo justicia para ambas víctimas hospitalizadas AÚN. Además denuncian a autoridades militares de “intentar eliminar las pruebas del incidente”.
Las madres de los dos uniformados piden que ambos puedan recibir atención médica en el exterior del país por la gravedad de sus lesiones.
Los destacados cadetes Cristian Alexander López Viamont y Erlan Ángel Condori Calle sobrevivieron de milagro a una caída de más de 20 metros de altura luego de un fallido “salto de la muerte”. Uno de ellos pudo grabar el accidente con una cámara GoPro que tenía instalada en su casco, equipo que se ha constituido en una “prueba valiosa” en la investigación. Por el caso hay militares “bajo la lupa”; dos ya tienen detención preventiva, por cuatro meses, por presunto delito de lesiones gravísimas.
El martes 18 de abril, la celebración por el 132 aniversario de reapertura del Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel” en la zona de Irpavi, La Paz, terminó en desgracia. Todo comenzó cuando el último grupo se alistaba para la demostración de “eficiencia combativa”. Cuatro cadetes para el salto “frente al valle” y dos, los accidentados de 21 y 23 años, para el “de la muerte”.
Fuente: Opinión