Biden libera petróleo de sus reservas ¿qué dirá la OPEP?

Estados Unidos anunció esta semana que liberará 50 millones de barriles de petróleo de sus «reservas estratégicas» para hacer frente al aumento del precio de la gasolina, que está afectando el bolsillo de los ciudadanos, según publica BBC.

Otras grandes economías como China, Japón, Reino Unido, India y Corea del Sur harán lo mismo y liberarán parte de sus reservas estratégicas y así ayudarán a aumentar la oferta en el mercado de crudo.

Estados Unidos ha intentado en vano convencer a los miembros de la OPEP , que en el último año han buscado mantener controlado el mercado para apuntalar los precios, sobre la conveniencia de aumentar la oferta de petróleo aceleradamente para responder a la recuperación de la economía mundial tras el impacto de la pandemia, pero estos productores han optado por un incremento paulatino y limitado.
La medida de la Casa Blanca es una medida inédita que, además, puede generar tensiones con los países de la OPEP, según advierten analistas.

Luego del embargo petrolero que los países árabes impusieron a los gobiernos occidentales por su apoyo a “Israel” durante la guerra de Yom Kippur en 1973, los precios del crudo se cuadriplicaron en 1974, y generó problemas de escasez de combustible en Estados Unidos, por lo que creó esta reserva estratégica para protegerse de los vaivenes del mercado y de cualquier posible interrupción en el suministro.

De acuerdo con la publicación, la reserva de EE.UU. es la más grande del mundo con unos 620 millones de barriles. En circunstancias puntuales ha pedido ayuda y en otras ha prestado de lo que almacena, ninguna de estas situaciones están presentes en este momento.

Raad Alkadiri, director gerente de Energía, Clima y Recursos de la consultora Eurasia Group, dijo a BBC Mundo que: «Esta es una medida muy inusual. Cuando Estados Unidos ha liberado petróleo de la reserva lo ha hecho porque han ocurrido grandes interrupciones en la oferta. Lo hizo en 2011, cuando la caída de Gadafi en Libia llevó a la suspensión de sus exportaciones petroleras «, pero nunca en esta escala ni en respuesta a los precios, siempre ha sido como una medida ante la interrupción física de la oferta ocurrida en otro lugar del mundo «, agrega.

También destaca el especialista que una iniciativa de este tipo no se produjo en el año 2008, cuando los precios del petróleo llegaron a máximos históricos de casi 150, mientras que estos momentos el precio del barril de petróleo se ubica un poco por encima de los 80 dólares.

Mientras, señala la Casa Blanca en un comunicado, Biden está mirando otras cifras porque «Los consumidores estadounidenses están sintiendo el impacto de los altos precios del combustible en las estaciones de servicio y en las facturas de calefacción de sus hogares; y los negocios también porque la oferta de petróleo no ha ido a la par que la demanda en momentos en los que la economía global resurge de la pandemia”.

El precio promedio de la gasolina en Estados Unidos ha aumentado 62% en un año cuando se ubicaba en 2,11 dólares. En un país, donde el petróleo sigue siendo la principal fuente de energía, representando en torno a 35% del suministro, esos incrementos se hacen notar.

A este dilema se suma los problemas en las cadenas de suministro causados ​​por la pandemia, el resultado es que EE.UU. experimentó en octubre pasado una inflación interanual de 6,2%, la mayor registrada en 30 años.

Si la liberación de crudo de la reserva estratégica de Estados Unidos es una medida extraordinaria, más aún lo es que se haga de forma concertada con otros países: eso no ocurrió desde 2011, cuando sucedió el derrocamiento de Gadafi en Libia.

Pero, todavía no está claro si esta iniciativa logrará reducir de forma sensible el precio del petróleo ni que, en caso de lograrlo, tenga un efecto duradero.

El impacto final de la medida dependiente de dos factores: la forma en que se libere el petróleo y la reacción de los países de OPEP +.

Según el analista Aldakiri la cuestión real es el calendario: cuándo y cuán rápido llega este petróleo al mercado y esos volúmenes llegaran al mismo tiempo, tendrían un efecto significativo en el precio. Pero por la forma como parece estar previsto, se hará a lo largo de varios meses y aún no está claro cuántos barriles el gobierno será capaz de liberar rápidamente «, agrega.

Para el experto en el caso de Biden, el objetivo de esta medida va más allá de la posible reducción en el precio del barril, lo que pretende es enviar la señal de que está intentando detener el aumento del precio de la energía, que intenta contener la inflación en general de forma muy decidida.

Asimismo plantea que lo que está intentando Washington es transmitir la imagen de que está liderando un esfuerzo internacional para controlar el precio del petróleo.
Más adelante Aldakiri indica que -más allá de que también puedan estar registrando problemas de inflación- para los otros países participantes esta iniciativa es una oportunidad para ganar puntos con Estados Unidos, que es un socio estratégico.

China ya había recurrido en el pasado a su reserva estratégica para hacer frente a distintos problemas, incluidos incrementos de precios, y en el contexto actual es una manera fácil de demostrar buena voluntad y de distender las tensiones con Washington.
Los aportes de muchos de estos países serán relativamente en comparación con los de Estados Unidos. Así, por ejemplo, Reino Unido liberará 1,5 millones de barriles y Japón, 4,2 millones.

Los países de OPEP +, que ya antes de que se hiciera esta medida oficial, habían anunciado que la consideraban innecesaria y que probablemente tomarían cartas en el asunto si los grandes consumidores decidían echar mano de sus reservas estratégicas.

Peter Flynn de la Consultoría Price Futures de Chicago dijo a Reuters que medidas como estas generalmente no dan resultado. «La historia ha demostrado que la liberación de crudo de la SPR solamente tendrá un impacto a corto plazo y es una declaración abierta de guerra petrolera con el cartel OPEP +».

Desde abril de 2020, los países de OPEP + han mantenido un acuerdo que les permite ir aumentando gradualmente el flujo de crudo en el mercado. Este acuerdo de análisis aumentos de 400 000 barriles mensuales, pero que no son automáticos sino que cada mes son evaluados y aprobados por los gobiernos.
«Esto ha sido diseñado como una herramienta para manejar el mercado mes a mes», dice Aldakiri.
El experto explica que la idea es que los inventarios ajustados impulsen los precios altos, pero que no sean demasiado altos. «La preocupación de la OPEP + es que los inventarios el año próximo sean demasiado altos, que haya exceso de oferta», agrega.
El experto explica que los países de la OPEP + se reunirán nuevamente a inicios de diciembre para decidir si proceden o no con el aumento de producción previsto para ese mes.
Si deciden no aumentar la producción, podrían amortiguar parte del impacto en los precios que busca la iniciativa de Biden.
«El balón está en el terreno de la OPEP +», advierte Aldakiri.

Fuente: Al Mayadeen español

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