La Federación de Comunidades Interculturales de Yapacaní anunció que, a partir del mediodía del lunes 10 de marzo, activará un bloqueo de caminos en protesta por la falta de combustible en la región. El dirigente Edwin Muñoz explicó que el Gobierno tiene hasta ese día para garantizar el abastecimiento de diésel y gasolina, o de lo contrario, el bloqueo será indefinido.
Mediante un comunicado, la Federación convocó a sus 23 centrales, sindicatos y cooperativas a sumarse al bloqueo en el puente de Yapacaní, ante el incumplimiento de compromisos por parte del Gobierno. Entre las principales demandas se encuentran el abastecimiento de combustibles, la despigmentación de la gasolina y el desbloqueo de la tarjeta BSisa Productor.
“La gente, los productores piden combustible en los surtidores. Esa es la única garantía para que no haya movilización”, manifestó Muñoz. Los interculturales responsabilizan a YPFB y a la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) por el desabastecimiento, y exigen atención a los proyectos y programas impulsados por los ministerios de Medio Ambiente y Agua y Desarrollo Rural y Tierra.
La crisis de combustibles no solo afecta a Yapacaní. En Santa Cruz, el transporte urbano anunció un paro indefinido con cierre de carreteras desde el miércoles 12 de marzo, si no hay solución al desabastecimiento. El dirigente Bismark Daza indicó que dieron un plazo de 48 horas al Gobierno para resolver la situación.
El Gobierno atribuyó la falta de combustibles al bloqueo de créditos en la Asamblea Legislativa, que limita el flujo de dólares en el país, y garantizó que se incrementarán los volúmenes de abastecimiento. Sin embargo, las filas en las estaciones de servicio siguen creciendo, y la situación ha generado malestar en varios sectores productivos.
En Beni, la escasez de diésel ha provocado la pérdida de 5.000 hectáreas de cultivos de arroz, debido a la imposibilidad de cosechar a tiempo. Según el presidente de los productores de arroz de Beni, David Pérez, 300.000 quintales de arroz quedarán fuera del mercado por esta crisis, agravada por las intensas lluvias.
“Los camiones tardan entre tres a cinco días en cargar diésel y volver a recoger el arroz. La verdad es preocupante. Solicitamos cinco millones de litros de diésel para marzo y abril, pero hasta ahora no hay respuesta”, explicó Pérez.
La situación mantiene en alerta al sector productivo y exacerba los ánimos de los vecinos, quienes ya adelantan movilizaciones de protesta en municipios como Concepción y Yapacaní.