El Primer Comando Capital (PCC) se apoderó del Paraguay, según una investigación periodística que publica el diario O Globo de Brasil, uno de los más importantes de ese país. La misma está firmada por los comunicadores Aline Ribeiro y Nicolás Iory.
Según la publicación, el grupo criminal actualmente acapara el tráfico de marihuana y de cocaína, provenientes principalmente del Perú y Bolivia, para luego enviar la mercancía a los mercados del Brasil, Europa y África.
O Globo dice que el hecho que marcó el ingreso del PCC y el aumento significativo de su poder en el Paraguay, fue el asesinato, en junio del 2016, del empresario de frontera Jorge Rafaat, ocurrido en la ciudad de Pedro Juan Caballero.
Conforme con la serie del medio brasileño, Daniel Hirata, investigador de la Universidad Federal Fluminense, citado en la publicación, hubo un reacomodo de rutas y corredores de drogas, tras el asesinato de Rafaat.
Ese año 2016, se rompió el pacto de no agresión que había entre ambos grupos criminales, por lo que el PCC declaró la guerra al Comando Vermelho (CV), con lo que hubo una serie de conflictos en las diversas prisiones del Brasil. Fue en este tiempo que se produjeron las mayores masacres carcelarias en esa nación, afirman.
La publicación señala que existen diferencias entre el CV, que opera con una estructura más autónoma y flexible, mientras que el PCC mantiene una jerarquía centralizada, lo que permitió que el primero tuviera una rápida expansión en otros estados del Brasil, ya que había divisiones internas en el otro.
Con ello, hubo disputas entre ambos grupos para el control de las rutas de la droga, por lo que el PCC se concentró en tomar el control del Paraguay, algo crucial para estos delincuentes organizados.
De acuerdo con la publicación, el traslado en el mes de febrero de 2019, de Marcos Willians Herbas Camaco, “Marcola”, a una prisión fuera de San Pablo, fue fundamental sobre la guerra que su grupo tenía con el Comando Vermelho (CV).
REUNIÓN. La investigación del medio brasileño revela que los abogados del CV se reunieron con Marcola en plena prisión para negociar un acuerdo entre los grupos, ya que los líderes, entre ellos, Márcio Dos Santos Nepomuceno, “Marcinho VP”, también estaban presos con estrictas medidas de seguridad.
Ambos coincidieron en que el verdadero enemigo era el Estado brasileño y no el crimen organizado, por lo que sugirieron una unión entre los dos grupos.
De esta manera, el CV solicitó al PCC que pudiera financiar a los juristas y abogados para ambos grupos criminales.
La investigación periodística cita a Lincoln Gakiya, del Grupo de Actuación Especial de Represión al Crimen Organizado (Gaeco), que informó que el PCC, habría aportado unos 10 millones de reales para pagar a los profesionales del Derecho.
Conforme con la publicación, a la fecha, el Primer Comando Capital, se apoderó del Paraguay.
En nuestras cárceles, la última acción del gobierno para luchar con el crimen organizado, fue el Operativo Veneratio, donde se intentó desarticular al Clan Rotela, de mayor influencia en Tacumbú, aunque el PCC, también tiene dominados otros penales.
Asesinato del narco con ametralladora
El 15 de junio del 2016, se produjo el atentado donde mataron a Jorge Rafaat Toumani, alias Sadam, con una ametralladora antiaérea calibre .50, en plena ciudad de Pedro Juan Caballero, Amambay. El poderoso empresario de frontera fue interceptado, cuando iba en una camioneta Hummer, por un vehículo Ford 250 y otros dos Toyota Hilux, que le cerraron el paso. Más de diez hombres de varias organizaciones delictivas se unieron para este ataque y el vehículo recibió más de 200 disparos.
Fuente: ultimahora.com