Según las investigaciones, el exgerente financiero de Emapa poseía Bs 1,4 millones fuera de su perfil económico, a pesar de un paso intermitente por el cargo. Franklin Flores recibió depósitos de parte de funcionarios de la estatal
Mientras avanza la investigación del Ministerio Público sobre el caso Emapa, surgen nuevas revelaciones. El exgerente de la estatal y principal acusado de enriquecimiento ilícito, Franklin Flores, habría tenido ingresos “no justificados”, junto a otros exejecutivos clave.
Según un reporte de la Red Erbol, basado en las investigaciones de la Fiscalía, el salario acumulado de Flores, entre 2022 y 2025 fue de Bs 700.000 y la investigación fiscal detectó un «excedente que no fue justificado» por Bs 209.150, cifra en la que se habrían evidenciado «depósitos por parte de funcionarios de Emapa».
Flores fue aprehendido el martes en un domicilio de la ciudad de La Paz, donde se secuestró documentación clave, aunque «se acogió a su derecho de guardar silencio» ante el Ministerio Público, según informó el fiscal departamental de La Paz, Luis Carlos Torrez. En un breve contacto con los medios, luego de su declaración, el exejecutivo se limitó a señalar: «Tenemos todos los informes técnicos legales para demostrar que la planta funciona.»
El escándalo salpica a otros altos funcionarios de la estatal, también aprehendidos y bajo investigación. Según el despacho de Erbol, Marvel Javier V. O. (exgerente financiero), se estableció que poseía Bs 1.400.900 fuera de su perfil económico. A pesar de un paso intermitente por el cargo de jefe financiero, la Fiscalía detectó que el exejecutivo contaba con cuatro vehículos, uno de los cuales «fue pagado en su integridad en efectivo». También es investigado por enriquecimiento ilícito.
Daniela Elena A. (fiscal de Obras Civiles), quien acudió voluntariamente y terminó aprehendida, habría tenido un incremento de Bs 61.290 fuera de su patrimonio. Al igual que en el caso de Flores, en sus cuentas «se pudo evidenciar también los depósitos de funcionarios públicos».
Los indicios sugieren que la funcionaria no controló el derecho propietario para la construcción de la Planta de Transformación Centro de Acopio y Almacenamiento de papa en El Alto e, incluso, avaló dos contratos modificatorios que «no cumplen lo establecido en el artículo 89 en el Decreto Supremo 181», sin realizar observaciones.
Irregularidades en la Construcción
El caso de enriquecimiento ilícito se vincula directamente a las irregularidades en la construcción de la planta de procesamiento de papa en El Alto, adjudicada a la empresa Piloto SRL y Asociados.
Las indagaciones apuntan a que los dos contratos modificatorios realizados durante la obra «no cumplen lo establecido en el artículo 89 en el Decreto Supremo 181», incluyendo «modificaciones e incrementos de ítems y alteraciones de precios unitarios sin una justificación técnica adecuada, ni causales extraordinarias como exige la norma vigente».
Un hecho aún más grave es que la obra, que operó parcialmente (aproximadamente 36 días de producción de papa y 50 días de puré de papa entre enero y julio de 2025), se construyó en un terreno que no pertenece a Emapa. Dos años después de un convenio de cesión con la Alcaldía de El Alto, la estatal no logró consolida su derecho propietario sobre el predio, es decir, que se construyó en un predio que no le pertenece.
Fuente: El Deber


