Catorce migrantes africanos mueren ahogados frente a costa de Túnez

Catorce migrantes africanos mueren ahogados y 54 fueron rescatados después del naufragio de la embarcación que los transportaba frente a la costa de Túnez, reportó AFP.

El naufragio ocurrió frente Sfax (centro-este) en la noche del miércoles, añadieron los guardacostas tunecinos en Facebook.  

La tragedia se registró en momentos en que muchos migrantes de países subsaharianos quieren irse de Túnez.

Después de los comentarios del presidente tunecino, Kais Saied, contra la migración clandestina.

Migrantes africanos

A mediados de febrero, Saied afirmó que la presencia en el país de «hordas» de clandestinos procedentes de África subsahariana eran una fuente de «violencia y de crímenes».

Tras este discurso, condenado por oenegés, numerosos ciudadanos de países subsaharianos fueron blanco de agresiones e intentaron acudir a sus embajadas para ser repatriados.

Según cifras oficiales, Túnez cuenta con más de 21.000 personas de países de África subsahariana.

En su mayoría en situación irregular, es decir menos del 0,2% de una población de unos 12 millones de personas.

Migrantes pakistaníes

Cuando Muhammad Nadeem dejó su casa en el este de Pakistán, pidió a su madre que rezara por su llegada a salvo a Europa y se escabulló antes de que ella pudiera replicar.

Originario también de Gujrat, en la provincia de Punyab, Ali Hasnain mostró a sus familiares antes de partir la ropa que lo iba a acompañar en este largo viaje hacia una vida que esperaba mejor.

Aunque no se conocían, los dos hombres murieron en la misma ruta clandestina en febrero. Zarparon de Libia y, según sus familias, fallecieron en el Mediterráneo, víctimas de la travesía marítima más letal del mundo.

«Fue como si el cielo se derrumbara cuando nos enteramos de la noticia», declara Kausar Bibi, la madre de Nadeem, mientras la viuda se lamenta en otra habitación.

La economía decaída de Pakistán, con una inflación y numerosos cierres de fábricas, empuja a numerosos jóvenes a emprender las peligrosas rutas clandestinas hacia Europa.

Fuente: ABI