La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) expresó su preocupación ante la posibilidad de un incremento salarial excesivo, solicitando al gobierno nacional considerar la situación económica del país y la propuesta del sector empresarial.
El presidente de la CEPB, Giovanni Ortuño, manifestó que las 29 entidades empresariales nacionales y departamentales que componen la Confederación comparten una profunda inquietud por las consecuencias de un aumento salarial que consideren desmedido, especialmente en el contexto actual de crisis económica, inflación y desempleo.
Ortuño recordó que la Central Obrera Boliviana (COB) demandó un aumento salarial del 15% al básico y 20% al mínimo, calificándolo de «un incremento salarial irracional e indiscriminado, desligado de la productividad y que se imponga por razones políticas». Advirtió que un incremento de esta magnitud podría generar un descontrol inflacionario y un alto desempleo, repitiendo errores del pasado.
El presidente de los privados informó que hasta la fecha no han recibido ninguna respuesta a la carta que la CEPB remitió al presidente del estado el 26 de marzo, en la que solicitaban una reunión para expresar su postura y la de los sectores productivos sobre este tema delicado.
Finalmente, Ortuño lamentó la falta de diálogo por parte del gobierno, señalando que la insistencia de la COB en un aumento salarial elevado podría ser catastrófica para las medianas y pequeñas empresas, generando imposibilidad de mantener sus operaciones y paralizando cualquier plan de expansión o crecimiento. Expresó su preocupación por que el gobierno se alinee únicamente con la COB sin escuchar al empresariado, especialmente considerando la urgencia de un acuerdo con la Confederación de Empresarios Privados, quienes se consideran imprescindibles para una determinación equilibrada que no perjudique a sectores ni áreas de la economía.


