La Fiscalía uruguaya determinó este miércoles dejar en libertad al suegro del narcotraficante Sebastián Enrique Marset Cabrera (32), detenido la mañana de este miércoles en el marco de un operativo para capturar a su hijo, Mauro García Troche, cuñado del fugitivo.
La fiscal de Pando de primer turno, Silvia Blanc, dispuso la libertad del suegro de Marset, Guillermo García, luego de que fuera detenido en un operativo realizado en Empalme Olmos en el que se buscaba a su hijo Mauro, sobre quien pesa una orden de captura internacional emitida por Paraguay, en el marco de la Operación A Ultranza.
La fiscalía informó que el hombre fue indagado sobre un arma encontrada en el allanamiento que no estaba en regla y quedó en calidad de emplazado, sin medidas cautelares, en tanto se realizan las pericias al arma y a los celulares y laptops incautados en el operativo.
El allanamiento en busca de Mauro García Troche fue realizado este miércoles, tras un trabajo de información e inteligencia llevado adelante por la Dirección General de Lucha contra el Crimen Organizado e Interpol.
El uruguayo de 42 años no pudo ser detenido por los efectivos, informó el Ministerio del Interior. Según agregó en un breve comunicado, a pesar de que no se logró la detención de García Troche, se detuvo al padre del prófugo, debido a la presencia del arma sin los papeles de tenencia correspondientes.
El lugar donde se realizó el allanamiento ya había sido detectado por la Policía uruguaya en 2020, en una investigación realizada a pedido de las autoridades paraguayas, en la que se constató que familiares de Marset eran los destinatarios de fondos proporcionados por la pareja para comparar campos, autos de alta gama e instalar pequeños comercios de barrio de bajo perfil, como una peluquería, una casa de venta de bolsas en la zona de Piedras Blancas, viviendas en la zona de Manga y la chacra ubicada entre Empalme Olmos y San Jacinto, entre las rutas 7, 82 y 11.
Según la investigación realizada por Uruguay, el suegro recibía fondos suministrados por Marset y su hija y los repartía entre sus otros tres hijos. La investigación señala que el único que tenía contacto directo con Marset era Mauro, quien realizaba transportes en camión desde Asunción. El hombre, de 61 años, tiene antecedentes penales, pero actualmente no hay sobre él ninguna requisitoria judicial.
La Diaria Justicia