El levantamiento militar del pasado miércoles en La Paz ocasionó el incremento de los precios de los alimentos en mercados y tiendas del país, sobredemanda de combustible y el retiro de al menos Bs 200 millones de los cajeros automáticos, reconoció el Viceministerio de Defensa del Consumidor.
“El golpe fallido ha provocado un desborde. Diferentes mercados, tanto populares como supermercados, incluso las tiendas de los barrios, han incrementado los precios. Y la gente desesperada ha tenido que comprar, se ha tenido que aprovisionar por esta situación criminal que hemos vivido en el país”, lamentó el viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, Jorge Silva.
Al día siguiente de ese acontecimiento, el jueves, el gerente general de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), Franklin Flores, reportó que durante las tres horas de zozobra, se triplicó la venta de los principales productos para la canasta familiar.
“El golpismo provocó desesperación, se registraron filas en diferentes supermercados privados y públicos, para adquirir alimentos. Esto generó el incremento en los precios de los alimentos, como en la carne de pollo que de 14 bolivianos llegó hasta los 80 bolivianos, el arroz también sufrió un incremento de 5 bolivianos”, afirmó.
Luego de esta situación que vivió el país, al día siguiente tras un relevamiento de información realizado por Emapa, y por el control de los gobiernos autónomos municipales, se constató que la venta de alimentos volvió a la normalidad.
Combustibles
En tanto, según Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), la población acudió masivamente a las estaciones de servicio de todo el país y formó largas filas por la sobredemanda.
Ese día, pese a las filas, la estatal petrolera aseguró que el abastecimiento de combustibles en los nueve departamentos del país se desarrolló con “absoluta normalidad”. El suministro de gasolina y diésel al transporte público y privado no sufrió interrupción alguna”.
Al día siguiente, el director de la ANH, Germán Jiménez, informó que, para abastecerse, el país cuenta con casi 50 millones de litros de combustibles que están en tránsito de importación y stock en plantas de almacenaje.
“Estamos trabajando para garantizar el abastecimiento. Hay una coordinación permanente con YPFB”, aseveró.
Descartan corrida bancaria
La directora de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), Ivette Espinoza, explicó que las largas filas en los cajeros automáticos, entre las 16:00 y 18:00 del miércoles, ocasionó un impacto menor al 1% en el total de los depósitos en el sistema financiero nacional.
“El 1 por ciento es menos de 200 millones de bolivianos, eso es nada para la cantidad de liquidez que tienen las entidades financieras (…). Por tanto, no podemos hablar de una corrida bancaria”, aclaró la ejecutiva.
Las diferentes entidades financieras informaron a la ASFI que los cajeros automáticos, pese a atender la demanda de muchos consumidores en esas horas de zozobra, tampoco quedaron sin efectivo.
Gracias a la liquidez con la cuenta el sistema financiero nacional se pudo atender la demanda en los cajeros y ahora el panorama está “completamente normal”, resaltó Espinoza.
“Las cifras que presentan las entidades financieras en lo que hace a solidez, solvencia y liquidez son buenas (…). Las entidades financieras cuentan con la suficiente liquidez para atender las necesidades que tienen”, remarcó.
Correo de Sur