Otro crimen expone la crisis carcelaria en Palmasola: un interno fue estrangulado por un «encargado de disciplina»

Santa Cruz, Bolivia, 9 de mayo de 2025. Un nuevo asesinato en el penal de Palmasola volvió a poner en evidencia la crítica situación del sistema penitenciario. José Alberto Salvatierra Rodríguez, recluido por una causa de asistencia familiar, fue hallado sin vida el martes por la madrugada en el área de ambientación del pabellón PC-8, una celda compartida por más de 180 personas en condiciones precarias.

La Policía y el Ministerio Público señalaron como responsable del crimen a Alexander Roca Suárez, interno por violencia familiar y considerado “encargado de disciplina” dentro de esa misma celda. La fiscal Rose María Barrientos lo imputó por homicidio y la jueza Janeth Paniagua ordenó su detención preventiva por 150 días. La medida, sin embargo, es solo formal, ya que Roca ya se encontraba bajo custodia.

Durante la audiencia, el acusado declaró que Salvatierra incomodaba a otros internos al caminar sobre ellos mientras dormían. Según su versión, lo sujetó del cuello para reprenderlo y lo llevó contra una pared, provocándole la muerte por asfixia. Aunque mencionó la posible intervención de otros privados de libertad, la Fiscalía solo presentó pruebas en su contra.

El pabellón donde ocurrió el hecho alberga a cerca de 500 internos repartidos en apenas tres celdas. La mayoría duerme en el suelo, sin colchones ni condiciones dignas. Este asesinato es el tercero registrado en Palmasola desde enero. El caso más grave ocurrió el 12 de ese mes, cuando una mujer fue asesinada por su pareja durante una visita. Días antes, otro recluso murió en el penal de Cerprom, en Montero, también bajo condiciones de hacinamiento.

Actualmente, Palmasola supera los 9.500 internos. Más de la mitad permanece en el pabellón PC-4, y el resto se encuentra en otras áreas igualmente saturadas. El sector femenino alberga a más de 600 mujeres, muchas acompañadas por sus hijos.