Cochabamba, Bolivia. El transporte federado, libre y pesado de Cochabamba se declaró en emergencia debido al desabastecimiento de combustible que afecta al departamento en los últimos días. Los transportistas denunciaron largas filas en los surtidores en busca de diésel, reportando que algunos afiliados del transporte pesado han tenido que esperar hasta dos días para abastecer sus vehículos.
Representantes del sector señalaron que esta situación está generando grandes pérdidas económicas, afectando gravemente sus operaciones. Advirtieron que, si no se da una pronta solución al problema de suministro, no descartan asumir medidas de presión en los próximos días.
El secretario ejecutivo del transporte federado, José Orellana, manifestó su preocupación por la crisis de combustible y exigió al gobierno nacional una respuesta inmediata para evitar una paralización total del servicio en el departamento.
Hasta el momento, las autoridades nacionales no han emitido un pronunciamiento oficial sobre el conflicto, mientras la situación sigue generando malestar entre los transportistas y la población afectada por la escasez de diésel.