“No hay pruebas que incriminen a Cristina Fernández de Kirchner”, son las palabras del embajador de Argentina en Bolivia, Ariel Basteiro, quien se refirió al procesol que enfrenta la actual vicepresidencia de Argentina, quien está siendo objetivo de una persecución jurídica, política y mediática por supuesta corrupción durante sus dos mandatos.
El embajador Basteiro afirmó que estos intentos de desestabilización al Gobierno argentino son los mismos que ocurrieron en Bolivia en 2019 con el golpe de Estado y en Perú desde que asumió Pedro Castillo.
Un fiscal argentino pidió 12 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos para la vicepresidenta Fernández, por los delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta en el juicio oral que enfrenta por irregularidades en la adjudicación de obras viales durante sus dos mandatos.
La fiscalía calculó la defraudación en alrededor de mil millones de dólares.
En este contexto, los gobiernos de Bolivia, México, Argentina y Colombia dieron su respaldo a Fernández e indicaron que hay intereses políticos detrás de este proceso.
Por su parte, la vicepresidenta argentina denunció que la investigación que enfrenta es en realidad “contra todo el peronismo”, una “ficción” sin pruebas ni sustento jurídico. Planificada por el expresidente Mauricio Macri, representante de “aquellos que van por todo, por los salarios, los derechos de los trabajadores y los jubilados”.
Por: Abya Yala Televisión